Esa foto fue tomada en el patio de nuestra casa en Santiago. Yo tenía 3 años y mi hermano Orlando 7 años. Me encanta esa foto!

Como se entiende, Orlando es mayor que yo (me he ofendido porque algunas personas, gracias a Dios pocas, creen que yo soy más vieja! No!! él es mayor que yo, lo que pasa es que tiene esa carita de baby-face que lo ayuda! jajajajaja) y nací cuando él tenía 4 años.

Yo vivía celosa de él porque sentía que le daban más privilegios que a mi. Pero eventualmente y gracias a Dios fui creciendo en edad y madurez y todo eso quedó en el pasado.

Las cosas que hemos pasado juntos nos ha unido muchísimo. Nos queremos mucho y me siento protegida por él.

Desde pequeño le ha gustado la política. Se involucró en ese mundo junto con mi papá y mi mamá. Yo me mantuve al margen, aunque me he dado cuenta que definitivamente mantenerme al margen de los acontecimientos políticos del país y de mi familia no permite que yo pueda incidir desde mi propio espacio a propiciar cambios que entiendo este país necesita.

Recuerdo una anecdota que una vez Juan Bosch visitó a mi papá en nuestra casa en Santiago y cuando conoció a Orlando dijo: “ese muchachito va a ser Presidente”.

Mucha gente en la calle también se me acerca y me dice que le encanta la forma de Orlando, sencillo, no conflictivo, inteligente y que “va a llegar lejos”.

Ese es el hermano que yo conozco. Serio. Honesto. Inteligente. Conciliador. Tecnológico (si es la palabra correcta, o sea, le encanta la teconología, el Internet, me introdujo en Twitter! jajajaja) Y con una gran capacidad para servir y con grandes planes para echar hacia adelante a este país.

Por eso apoyo su candidatura a la Secretaría General de Partido Revolucionario Dominicano. Creo que el partido lo necesita para que pueda avanzar y pueda adecuarse a los nuevos tiempos.

El 27 de septiembre estaré votando por él y apoyándolo donde me necesite.

Un abrazo Orlando. Cuenta conmigo siempre. Como nos decía papá: Unión, Fuerza y Amor, Venceremos!